Algunos dicen que voy a estar mejor sin ti, pero ellos no te conocen como yo, o por lo menos los lados que yo conocía. No puedo soportar este momento, se prolonga como pierdo mi cabeza, recordando por las cosas que encuentro, como los apuntes y la ropa que has dejado atrás. Despiértame, despiértame cuando todo acabe. No me levantaré hasta que esta batalla esté ganada. Pero no me iré, no puedo hacerlo por mi misma. Si esto no es amor, entonces ¿qué es?

domingo, 27 de noviembre de 2011



Tener la oportunidad, poder estar más allá, tan acostumbrado a no ser, a desconfiar, a no ganar. 
El mar se te abrió una vez, se te abrió para no parar, y vos no te despertaste, lo arruinaste una vez más. 
Es tan perfecto que asusta, porque nunca es justa la felicidad, saber elegir es lo que cuesta más, no cualquiera suma sin restar.
Sentis la electricidad, y no la sabes llevar, te quema, te paraliza, y no te deja reaccionar.
El enemigo peor, ese gran saboteador, siempre será uno mismo y ese miedo a estar mejor
Nunca es justa la felicidad, ni la justa nunca es justa, porque algunos nunca la tendrán.

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